viernes, 15 de febrero de 2013

Me enseñaste.

Me enseñaste de todo excepto a olvidarte desde filosofía hasta como tocarte a saber que el afrodisíaco más cumplidor no son los mariscos sino el amor pero no me enseñaste a olvidarte Me enseñaste de todo excepto a olvidarte a convertir una caricia en una obra de arte a saber que los abogados saben poco de amor y que el amor se cohibe en los juzgados pero no me enseñaste a olvidarte pero no me enseñaste a olvidarte

No hay comentarios:

Publicar un comentario